Te explicamos unos sencillos trucos para vestir la ventana del baño. En esa elección hay que conseguir una armonía entre el buen gusto y lo más práctico.
Por un lado deberá dejar pasar luminosidad. Es fundamental que no perdamos la luz natural si la orientación del baño lo permite. Por otro lado en un espacio tan pequeño es fundamental ganar el mayor espacio posible.
La primera posibilidad es un estor enrollable. Este podemos ponerlo en el techo cubriendo toda la ventana. Así, quedará más decorativo. El inconveniente es que tendremos que subirlo si tenemos una ventana abatible para poder abrirla. No tendremos este problema con una ventana corredera. Como solución podemos instalarlo en el propio aluminio cubriendo solo el cristal.
Si la ventana tiene persiana o el cristal está biselado el mejor tejido es el screen. Al ser un material plastificado de PVC y tener agujeritos, deja pasar muy bien la luz y se conserva perfectamente a pesar de la humedad. Podría incluso mojarse sin que se dañase.
Si la ventana no tiene persiana tendremos que elegir un textil resinado translucido más opaco. Entrará menos luz pero te dará intimidad en las horas de noche.
Tanto un tipo como otro pueden ser lisos en un solo color o imprimir una imagen. Dependerá de si queremos utilizarlo como un elemento decorativo. También dependerá del presupuesto al ser una opción más costosa.
La segunda opción es la más sencilla y económica. Unos porta visillos o barritas a presión en el extremo superior e inferior del cristal. No necesita taladros en el aluminio y la instalación es muy sencilla. Se confecciona un visillo con el alto del cristal y este se mete por las barritas. El efecto es muy decorativo y no estorbará para poder abrir y cerrar la ventana. Esta es la mejor solución para no perder nada de espacio. Además al utilizar un textil podremos quitarlo y meterlo en la lavadora para su limpieza .
