A la hora de escoger el textil para la confección de una cortina o estor, seguramente que tienes dudas sobre las ventajas e inconvenientes de una opción u otra. A continuación te detallamos que tienes que tener en cuenta para hacer una buena elección.
Lo primero que te contamos es que hay dos grupos principales de tejido. Los que se conocen como organzas muy trasparentes y los tejidos más tradicionales 100 % poliéster o con mezcla de lino.
Los tejidos cristal son gasas, con mucha caída y ligeramente satinados. Están indicados en salones y dormitorios principales. Consiguen ambientar las estancias más elegantes. Su principal característica es la trasparencia, indicado para cuando se quiere un textil muy ligero. Que no cubra, solamente utilizarlo como decoración.
Pueden ser lisos o estampados. Al ser tan livianos los estampados recargados o colores muy llamativos quedarán muy disimulados y no quitarán nada de luz natural.
En el segundo grupo encontramos los tejidos más consistentes y con composiciones naturales, que son los más demandados. Es el IDEAL para que te DEJE PASAR PERFECTAMENTE LA LUZ, pero NO TE VEAN. Además como son tendencia, existen muestrarios con diferentes texturas, mezclas y estampados.
El visillo con 20%-30% de lino y resto poliéster es la mezcla perfecta si optamos por un lino. Con mayor composición natural, el lavado y mantenimiento es más delicado y no es necesario para obtener una buena caída.
Los acabados de los diferentes fabricantes han avanzado mucho y hay textiles lisos o estampados con una composición 100 % poliéster con un tacto muy agradable. Con una puesta incluso mejor que algunos linos. Y con dos ventajas fundamentales. La primera es que no encogen en el lavado y la segunda que no necesitan planchado. Se pueden meter en la lavadora y mojados se cuelgan quedando perfectos.
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