Un mirador con un frontal y uno o dos laterales a cada lado puede ser complicado de diseñar. Hay que tener en cuenta diferentes factores Puedes ser el tamaño de las manivelas, de los tambores y la apertura de las ventanas…. Además en algunos casos no tenemos persianas, teniendo apenas un centímetro desde la ventana al techo. Sigue leyendo y te explicamos las diferentes opciones disponibles.
La primera opción que te explicamos es la más práctica. Son visillos o cortinas con una instalación de rieles al techo. A su vez, existen dos formas de poder diseñarlo.
La primera de ella es poner tres piezas individualizadas. Una en el frontal y otra en cada uno de los laterales. Los desplazamientos de las telas serán independientes en cada una de las partes. Además si el frontal es muy amplio podemos partirlo en dos piezas. Esta forma de hacerlo es la que mejor respeta la forma cuadrada del propio espacio. Los rieles pueden ser manuales o con cuerda.
La otra forma es poner un riel curvado a mano en un única pieza, haciendo la misma forma del mirador. Con un textil partido en dos paños. Esto nos permite mover el textil a lo largo del carriel en ambos lados. Y poder acumular las telas en los laterales dejando toda la ventana despejada. En este caso los rieles siempre son manuales.
La opción del riel manual quizás sea la más utilizada para poder controlar mejor la apertura de las telas. Además hay piezas que ocupa apenas un centímetro, interesante si tienes poco espacio para colocarlo en el techo. Para mejorar la apertura podemos utilizar añadir tiradores de aluminio blanco. Van enganchados en una corredera del riel y se facilita el movimiento además de no tocar las telas.
Especial atención queremos poner en este punto a la utilización de textiles especiales para el sol, cuando no tenemos persianas. Con estas colecciones de telas podemos oscurecer una estancia. Especialmente importante si es un dormitorio donde se impide el descanso por la entrada de luz externa. Además permite controlar la temperatura especialmente en verano. impidiendo la entrada de luz solar.
La segunda opción es poner estores. Estos pueden ser de textil y enrollables.
Los estores de textil serán cómodos si las ventanas son cortas. Con este sistema ganamos luz si queremos despejar toda la ventana. El principal inconveniente es que una vez lo subamos y abramos la ventana no podremos volver a bajarlos. Por ejemplo para el verano, donde las ventanas suelen tenerse abiertas con mayor frecuencia. La principal ventaja es una imagen limpia, recta y que te deja pasar perfectamente la luz natural.
Los estores enrollables pueden ser de screen. Quedan más sencillos y es una buena solución en miradores sin persianas. Este material puede tener diferentes composiciones y factores de apertura. El factor de apertura es el agujerito del material. Permite una menor o mayor entrada de luz. El 0º % es el completamente opaco y el 10 % el más abierto. Luego tenemos intermedio el 3% y el 5% que es el más habitual en un domicilio.
El screen es un tejido técnico que está preparado para recibir la luz directa del sol, parando esa entrada. Bajando incluso la temperatura de la estancia. Además podemos estar tranquilos porque no van a estropearse por esta exposición directa y protegiendo los muebles o la tarima del suelo.
La tercera opción es poner un panel japonés en el frontal y unos estores en los laterales. Este sistema es incluso más cómodo que poner solo estores. El panel japonés tiene desplazamiento lateral, no de arriba abajo. Entonces acumularemos las telas al lado contrario por donde solemos abrir. También puede ser manual para evitar las cuerdas y poder mover libremente las vías.
Para la confección del panel y el estor se puede elegir cualquier textil del catalogo de visillos o hacerlos de screen. Tanto lisos como estampados, incluyendo una combinación de colores. El panel japonés está dividió en vías en función de la anchura. Pueden ser 3,4 o 5 vías. Esto permite jugar con diferentes combinaciones.
En los laterales se harán unos estores de tal manera que quedará muy uniforme la confección de todo el conjunto
Por último podemos optar por las cortinas de lamas verticales en el frontal y la confección de estores enrollables en los laterales. Este sistema está recomendado sobre todo cuando la entrada de luz solar es muy fuerte. Se pueden utilizar los mismos materiales que el enrollable, incluido en screen en todas sus versiones. La vertical cuenta con un doble mando. Uno con desplazamiento a los lados. Otro nos permite la apertura de las lamas sobre si mismas para regular que entre más o menos luz.
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