Los tonos naturales, blancos y crudos son los favoritos a la hora de elegir las telas para unos visillos.. Te contamos las razones que te convencerán para elegir esta opción tan sencilla y a su vez tan práctica.
En primer lugar estos colores dejan pasar muy bien la luz natural. Sin distorsiones de color, haciendo las estancias más grandes. Si además las paredes son claras o en el mismo tono esa sensación de amplitud es total.
En segundo lugar podrás decorar con cualquier estilo de muebles o sofá. Si estás pensando en una renovación futura del mobiliario y quieres cambiar el textil de las cortinas ya, eligiendo está opción, acertarás seguro.
En tercer lugar son tonos a temporales. Siempre están de actualidad. No se pasan nunca de moda. Al contrario de lo que puedas pensar los colores blancos rotos o crudos aguantan muy bien el paso de tiempo. Siempre quedan impecables tras el lavado.
Estos visillos pueden ir partidos en medio o en una sola pieza. Si la ventana no es excesivamente grande y tienes ventanas abatibles, una pieza suele ser muy práctica. Puedes abrir sin problemas la ventana y luego volver a echar el visillo.
En cuanto a la sujeción siempre que se pueda será al techo. De esta manera aumentamos visualmente la estancia aprovechando todo el largo del tejido. Puede ser con un riel o una barra. Si elegimos el riel podemos ponerlo con cuerda o manual.
Si nos decantamos por una barra, el acero nos aportará una sensación de modernidad y luminosidad. La forja y la madera la utilizaremos para ambientes más cálidos y clásicos.
Renovar las cortinas de tu hogar o elegir los tejidos de tu nueva casa con esta tendencia es una apuesta segura. Para ello contamos con un muestrario muy extenso de visillos con distintas composiciones. Desde el práctico 100 % poliéster que no necesita planchado a los linos más exquisitos.
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